Odio tener una lista de tareas infinita de mil cosas pendientes, tener cursos a medio hacer, subir entradas sin dar el 100 % de mí misma, ir con la lengua fuera y correr a todos los sitios. Esto no es bueno.
Mi recámara de post se ha agotado, ya no tengo más post que me cubran esos días en los que no puedo preparar nada. Llevo una temporada viajando y estando mucho fuera de casa pero por fin me quedo tranquilita una temporada (eso espero). Pero tengo tantas cosas pendientes que no puedo avanzar, me colapso solo pensando en todo lo que debo hacer y al final de tanto colapso no hago nada. Así que he decidido pausar el blog un par de semanas.
Necesito detenerme, coger aire, observar y reflexionar. Quiero definir bien mi camino y hacer las cosas perfectas, lo sé...es un gran defecto que tengo pero si no, no estoy tranquila.
Que no cunda el pánico, no te pienses que es por falta de ideas, de eso me sobra. Tengo unos tutoriales pensados que te van a encantar pero quiero hacerlos bien, quiero reesctructurar el blog, ponerlo aún más bonito y solucionar mi incidente con las fotografías (he perdido todas y iphoto no me funciona y sin ello no puedo trabajar). Si quieres puedes suscribirte para enterarte cuando vuelvo y recibir los posts que estoy preparando con mucho cariño (a la derecha del blog).
¡No desaparezco del mapa! Seguiré dando guerra por facebook y sobre todo por instagram. Que haga una pausa por aquí no significa que deje de crear :)
Sed buenos. ¡Yo me pongo manos a la obra!